lunes, 25 de marzo de 2013

01376-59.ALICANTE: 01.La Cámara de Comercio

DOCUMENTO ANTERIOR: 01375

DOCUMENTO POSTERIOR: 01381 - 01719


                                                       I: DE GREMIOS A CÁMARAS

     La soledad del hombre se salvaba acudiendo éste al seno de un grupo, de modo que situarse en ese regazo creaba una iglesia cuya comunión enlazaba al grupo y protegía al individuo; tal protección lo era frente a otros hombres que no comulgaban con ese seno de acogida al quedar fuera de esa circunstancia en común que agrupaba a los afectados. A tal defensiva reunión se le llamó GREMIO.

    De tal manera maestros, y sus oficiales con sus aprendices en los talleres de un arte y oficio, lograron imponer sus intereses por encima del resto de los hombres no participes en tales iglesias. Se trataba de ponerse acuerdo en la innecesaria existencia de la competencia, de modo que se dejaba en manos del cliente la pura y simple elección del maestro, sin que quedase abierta la posibilidad de una segunda opinión o presupuesto, ya que lo que era en un taller lo era, también, en otro taller. Los MAESTROS reglaron la actividad logrando un equilibrio entre el número de talleres y los trabajos realizados, la transmisión de los saberes, los contratos, los materiales, los precios y la vida espiritual de sus miembros, gestionando para sí hospitales, exequias y la protección familiar de sus miembros, de modo que el Antiguo Régimen y el Mercantilismo fueron la sangre que fluía por sus venas. 

   Como quiérase que llegaron nuevos tiempos rodando sobre nuevos sistemas políticos y sociales, liberarse fue el deseo y someterse el recuerdo. El INDIVIDUO se quedó, de nuevo, solo, y en su soledad recuperó la competencia que devino en guerra; todos eran contra todos... hasta que el tiempo dio lugar a los SINDICATOS y a los COLEGIOS PROFESIONALES, siendo de tal modo que emergieron las CÁMARAS DE COMERCIO.


                 II: DE LAS CÁMARAS DE COMERCIO, INDUSTRIA Y NAVEGACIÓN

      En origen se trataba de recuperar el sentido asociativo dentro del concepto de competencia; he aquí la diferencia con el "gremio". Se trata de representar el conjunto de la actividad mercantil dentro de un espacio físico, incidir en las regulaciones municipales, crear sistemas de información útil para las empresas e informar sobre la existencia de "garbanzos negros".

       La pertenecía a las Cámaras siempre fue obligatoria en España, lo que traía consigo el pago del Recurso Cameral Permanente, lo que hacía de las cámaras organizaciones potentes debidamente financiadas por el mundo empresarial, de  ahí que las cámaras dispusiesen de activos suficientes, hasta que en  el año 2011 desapareció dicha obligatoriedad y, por tanto, empezaron a emanar las carencias de las cámaras y su verdadera consistencia de ausencia social.


   III: CÁMARA DE COMERCIO, INDUSTRIA Y NAVEGACIÓN DE ALICANTE

     La Cámara Oficial de Comercio Industria y Navegación de Alicante, es una Corporación de Derecho Público y se configura, en función de su normativa aplicable (Ley 3/1993, de 22 de marzo, Básica de la Cámaras Oficiales de Comercio, Industria y Navegación de España y la Ley 11/97, de 16 de diciembre de la Generalidad Valenciana, de Cámaras Oficiales de Comercio, Industria y Navegación de la Comunidad Valenciana) como órgano consultivo y de colaboración con las Administraciones Públicas con la finalidad de representar, promocionar y defender los intereses generales del comercio y la industria en el ámbito de la provincia de Alicante.

      Nace en 1887 y ha tenido diversas sedes, como en las calles de San Francisco, Labradores, Mayor, Sagasta, Mendez Nuñéz, Plaza del Ayuntamiento y San Fernando, hasta la actual en la Casa del Conde de Soto-Ameno, que fue después Gran Hotel, Hotel Iborra y Hotel Palas.

     El actual edificio fue comprado por 3.100.000 de euros y habilitado con otros 22.000.000 de euros, esto es... un estupendo negocio de 25.100.000 de euros desembolsados en los felices años del despilfarro del reinado de Rodríguez El Mentiroso, entre 2004-2009, de los cuales 14.100.000 de euros corrieron a cargo de las empresas que, naturalmente, las cargaron sobre sus ventas, de lo que se deduce que lo pagaron "los de siempre", y otros 11.000.000 de euros que aportó la Generalidad Valenciana, de lo que se deduce que lo pagaron "los de siempre". Así, LOS DE SIEMPRE pagaron 25.100.000 de euros a una organización empresarial que, en la actualidad, se encuentra en proceso de bancarrota, carece de presencia social cierta y ha tenido que despedir a la cuarta parte de sus trabajadores.

     Pero no queda ahí las cosa... LOS DE SIEMPRE pagan, a la vista de que las EMPRESAS no tienen sentido corporativo, vía GENERALIDAD VALENCIANA, un canon anual que, como el Gobierno Valenciano está en bancarrota, no aporta a la CÁMARA, lo que genera falta de liquidez en una entidad que carece de interés para las propias empresas, y cuya subsistencia pende de LOS DE SIEMPRE.


                                       IV: DE CÁMARA A CASA DE HUÉSPEDES

    De casa donde habitara el Conde de Soto Ameno pasó a casa de turistas y de comidas, y de tal condición se transformó en casa institucional empresarial para devenir, en breve, y si el tiempo y la autoridad no lo impide, a casa de "voceros" por quince años y a 300.000 euros por año, lo que supondrá 4.500.000 de euros de ingresos, muy lejos de la nefasta inversión de 25.100.000 realizada para una corporación de derecho público que poco interés despiertan entre las empresas y tanto desconocimiento constata entre "los de siempre".

      ¿Ha valido la pena gastar 25.100.000 euros de dinero público en un edificio que, finalmente, se puede convertir en la sede privada de un despacho de abogados?

No hay comentarios:

Publicar un comentario